Trump recupera sus tribunas en Facebook e Instagram - Botando Corriente #22
Además: Meta cambia sus normas de maltrato animal. Un juez en Colombia utiliza ChatGPT para argumentar una decisión. El experimento de Musk que podría llegar a Instagram.
Las reglas del juego
Meta aclara su política de maltrato animal
La compañía, que tiene reglas para sancionar el contenido de maltrato animal en Instagram y Facebook, aclaró que este tipo de publicaciones está permitido en algunos casos: como cuando se mata a un animal por piedad o defensa propia, o cuando se trata de publicaciones de toreo.
Por otra parte, Meta prohibió el contenido que muestre rescates de animales que al final resulten ser falsos, una regla que hace poco implementó YouTube.
Donald Trump recupera sus tribunas en Facebook e Instagram
Dos años después de haber sido suspendido de las plataformas de Meta, la compañía anunció que restablecería las cuentas del exmandatario, que aspirará a nuevamente a la presidencia de Estados Unidos en 2024. Trump había perdido estas tribunas, según Meta, por haber elogiado a las personas involucradas en la insurrección de Washington, que terminó con la invasión al Capitolio el 6 de enero de 2021.
La sanción fue aplicada en una situación de urgencia y sin parámetros suficientemente claros, como se lo hizo saber a Meta el Consejo asesor de contenidos —un órgano independiente que orienta a la compañía en asuntos de moderación—, que al revisar la decisión pidió tener procedimientos establecidos para estos casos y fijar un plazo para la sanción, que no podía ser indefinida.
Cumplido ese plazo, que finalmente fue de dos años, el escenario es muy distinto. Trump regresa a unas plataformas que han modificado sus políticas —gracias a él, en buena medida— para prevenir situaciones como las que se le presentaron.
Además, Nick Clegg, vicepresidente de asuntos globales de Meta, anunció un Protocolo de Política de Crisis que establece las pautas internas de la compañía para actuar en disturbios civiles y violencia prolongada de acuerdo con sus normas comunitarias.
A diferencia de otras redes sociales, como Twitter o YouTube, Meta no tiene reglas definidas para el contenido que deslegitime unas elecciones. Sin embargo, Clegg explicó que en estos casos podrán tomarse una serie de medidas para regular el alcance de las publicaciones, que van desde la pérdida de visibilidad hasta la restricción de las funciones de publicidad.
Como lo han puesto sobre la mesa Katie Harbath y Casey Newton, el regreso de Trump a las plataformas de Meta tiene además efectos económicos de los que pueden beneficiarse ambas partes. Por un lado, Trump puede utilizar estas redes sociales para recaudar fondos para su campaña, como lo ha hecho en el pasado. Por otro, el gasto de pauta puede ser muy atractivo para Meta, que en 2020 obtuvo más de 145 millones de dólares por la publicidad política de Trump en Facebook e Instagram.
Con esta decisión, YouTube es la última de las grandes compañías de redes sociales que mantiene a Trump suspendido. En noviembre del año pasado, poco después de comprar Twitter, Musk lo restableció tras el resultado de una encuesta en su cuenta personal.
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Juez en Colombia falla sentencia con ayuda de inteligencia artificial
Mientras que en el mundo se debaten los posibles efectos de las nuevas herramientas de inteligencia artificial en asuntos tan variados como la educación, la democracia o la desinformación, un juez en Cartagena, Colombia, redactó los argumentos de una sentencia con ayuda de ChatGPT.
El negocio, socio
La ‘contrainteligencia’ artificial
OpenAI, la compañía que ha desarrollado ChatGPT y Dall-E, lanzó al público una herramienta para detectar si un texto es producto de la inteligencia artificial o de los humanos, una de las principales preocupaciones del sistema educativo a raíz del auge de los programas de generación de texto.
La compañía advierte que esta nueva herramienta, llamada AI Text Classifier, no es del todo fiable y puede dar lugar a ciertos falsos positivos y no debe ser usada como el único medio para determinar si un texto fue escrito por un sistema automatizado. Además de sus usos en colegios y universidades, AI Text Classifier también podría ser útil para identificar propaganda y desinformación redactada a través de la inteligencia artificial.
El experimento de Musk que podría llegar a Instagram
Al igual que en otras redes sociales, la placa azul que indica que una cuenta está verificada se ha convertido en un símbolo de estatus en Instagram, especialmente entre creadores de contenido. El año pasado, por ejemplo, una investigación de ProPublica reveló un esquema fraudulento en el que cientos de usuarios pagaron decenas de miles de dólares para hacerse pasar por músicos y obtener sus placas azules.
La demanda por esta clase de insignias ha llevado a Instagram a plantearse un servicio de suscripción en el cual se ofrezca la placa a cambio de un cobro, tal y como lo ha propuesto Elon Musk a través de Twitter Blue, una de sus principales banderas desde que compró la compañía. A pesar de que la puesta en marcha de esa iniciativa dio como resultado una epidemia de suplantación en la plataforma —por la que Twitter tuvo que retractarse y suspender el programa durante unas semanas—, su experimento parece haber contagiado a Instagram. Esto, de acuerdo al desarrollador Alessandro Paluzzi, quien descubrió cambios recientes al código de esta red social que indicarían que Meta está explorando la posibilidad de monetizar esta función, originalmente pensada para dar confianza a los usuarios. En el pasado, Paluzzi ha logrado anticipar nuevas funciones de Instagram al analizar su infraestructura, como ocurrió con el calendario interno para cuentas profesionales o la opción de compartir perfiles mediante QR.